Tratamiento aplicado a los dientes que han cambiado de color y que trabaja con la aplicación directa de luz fría. Esta actúa de forma directa en los activadores localizados en los geles utilizados durante el blanqueamiento.
Es un sistema altamente seguro, rápido y eficaz, y evita la sensibilidad que provocaba el blanqueamiento dental láser, obteniendo resultados desde el principio.